La Cultura de la Música
Este
año debería de ser un gran año para la cultura en nuestra ciudad, ya que dos
entidades, con una intachable historia CULTURAL (y aquí sí se ha de poner
cultura con mayúsculas) celebran un larguísimo periplo de años, donde se han
vivido altibajos siendo superados todos ellos. Estas entidades son la Sociedad
Cultural Casino de Torrevieja con su 150 aniversario y la Unión Musical
Torrevejense que conmemora 175 años desde los orígenes de una
banda de música en Torrevieja, y que en el año 1927 se constituyó como sociedad
con el nombre que aún conserva. Entre las dos suman 325 años en los que la sociedad torrevejense
puede decir que la cultura ha estado presente en la ciudad, y a sus vecinos no
les ha faltado en ningún momento actos, conciertos, exposiciones; trayendo a personalidades,
teniendo lugar celebraciones y aquello que hace posible la unión e igualdad
entre sus vecinos: la música
generadora de conciencia ciudadana fomentando espacios de respeto. Por esto es
por lo que ha venido luchando la Unión Musical Torrevejense en sus 175 años de
historia.
Pero
la historia de la entidad es la historia del propio pueblo, ya que todos y cada
uno de sus componentes son hijos de Torrevieja. Y como en toda familia, la
historia de la UMT (que así se la conoce cariñosamente) está ligada a los
cumpleaños, bodas, nacimientos e incluso fallecimientos de sus componentes. Sus
socios (que aportan una cantidad simbólica en las cuotas) ayudan a que siga
dando pequeños pasos, uno tras otro, con dificultad pero sin desmayo. Con ello
se demuestra una vez más que la cultura
y en concreto la música no es el arte invisible que engrandecía el espíritu de
la burguesía en la Europa del siglo XIX.
Lo
cierto es que la capacidad de escuchar música del ser humano (no todos los
seres vivos la tienen) y la importancia de su lenguaje, ayuda a nuestra
construcción física e intelectual, teniendo la ineludible responsabilidad de
dar, de nuevo, un espacio central como función social. Entidades como la Unión
Musical Torrevejense son ejemplos de la importancia colectiva de la música que
modifican e implican a la comunidad en distintos niveles. Uno de ellos, es la
integración de grupos como la UMT en la vida de la sociedad torrevejense siendo
de gran importancia durante estos 175 años. Desde los orígenes, ha estado vinculada
al trabajo diario y a los acontecimientos de la ciudad, hasta la actualidad,
donde una de las necesidades es incorporar la música de banda a actos culturales
y musicales como son los conciertos, transformando y acompañando a las
diferentes generaciones, creando vínculos entre ellas, haciendo inseparable
vida y arte. Incluso muchos músicos han trabajado en sintonía con el tejido
mediático cambiante llevando sus conocimientos más allá de nuestra ciudad.
Y
es aquí donde las instituciones entran a valorar cuál es ese potencial de este
ya, gran entramado, de una entidad como podría ser la UMT en la distribución de
recursos. Las políticas culturales han de favorecer y apoyar a estos grupos en
pro de los beneficios que aportan a la comunidad. En este sentido, los entes
públicos han de anticiparse a las necesidades y solucionar los peligros por los
que pasan entidades que definitivamente están casi al borde del precipicio. Lo
que importa hoy es no desaprovechar los valores de la actividad musical desarrolladas
por un grupo tan numeroso como la Unión Musical Torrevejense que –lo reconocen–
los necesita. Y recordar que sus orígenes van ligados al nacimiento del propio
pueblo

