Viernes 1 de septiembre
Mañana viernes entramos en septiembre. No es por incomodar pero
ha acabado el período vacacional y volvemos a la actividad diaria. Este año no nos
preocuparemos del consabido síndrome posvacacional ya que afecta a uno de cada tres trabajadores,
(ya les gustaría a 3.335.924, padecer el síndrome “ese” y no el del parado) pero
septiembre es un mes con acontecimientos
curiosos:
Comienza el cole y sus gastos, y para paliar estos están los
bonos-libros. Pero ¿Cuándo cuesta la vuelta al cole? Uufffff, tanto que la
cartera de los padres está tiritando. Sin embargo los niños y niñas regresan al
colegio con sus lápices, cuadernos, carteras, ropa y un sinfín de cosas por
estrenar. No
olvidemos el enorme esfuerzo que muchas AMPAS han venido desarrollando en los
últimos años en los bancos de libros, cuyo trabajo es necesario reconocer y
valorar.
Nos quejemos de volver a trabajar y no creo que este bien quejarse
cuando la
Oficina de Estadísticas existen desempleados de larga duración
que han agotado las prestaciones o subsidios, y coloca a estas personas en una
grave situación de riesgo de exclusión
social.
Comienza la Liga de Fútbol, la mejor noticia con diferencia,
salvo que tú equipo pierda en la primera jornada. Comienza la Liga y los entendidos dicen que las cosas parece que van a pintar muy parecido a la de
otros años, con Barcelona y Real Madrid disputándosela,
mientras los demás compiten por el tercero puesto.
Comienzan las colecciones y fascículos conquistando nuestro
bolsillo. Y como cada año en estas fechas nos preguntamos ¿Cuál me llevo? ¿El
curso de ingles? ¿Los animalitos marinos o la edición restaurada de la serie
Verano Azul? … aunque en realidad la mayoría sólo
compra, como mucho, las dos primeras entregas.
Comienzan a acortar los días en septiembre. Además, suele
hacer menos calor, aunque ahora el tiempo está muy raro.
Comenzamos las clases en el gimnasio. Cosa de los kilos de
más por el veranito y las vacaciones. Aunque aumenten el número de matriculas, se
sabe que la asistencia a las clases no aumenta en el mismo porcentaje, ya
que los hay que se apuntan al gimnasio pero luego ni acuden.
Pero este septiembre es algo atípico. Tenemos la huelga en septiembre en todos los aeropuertos y la actividad política
que no comienza, ya que apenas se puede decir que se haya interrumpido. Entre el
tinto de verano y rebujito, hemos tenido declaraciones de los representantes de
las distintas fuerzas políticas.
Solo que para 14
familias y decenas de heridos, éste será un verano difícil de olvidar a causa
de la barbarie del terrorismo, que dejó una estela de dolor en éste verano.
España entera lloró la tragedia vivida en Barcelona.
Llega septiembre
sí, con el patio político revuelto que no
es más que la silicona que tapa casi todos los huecos.



