Día Internacional de la Convivencia en Paz 16 de mayo
Hoy
abro la ventana con el deseo de encontrar una respuesta a la pregunta: ¿Qué
hacemos para vivir en paz?
A
veces el árbol no nos deja ver el bosque o, en este caso, el exceso de
información sobre los conflictos en el mundo, nos impide conocer de verdad en
estos problemas, por qué se han producido y, lo más importante: qué podemos
hacer entre todos y todas para ayudar a las personas que están sufriendo en su
propia piel sus consecuencias. Lugares como Siria, Yemen, Sudan… y un largo
etc.; incluso, no es necesario irnos tan lejos, a nuestro lado tenemos personas
que la palabra Paz está muy alejada de su día a día.
Hoy
Día Internacional de la Convivencia en Paz podemos comenzar pensando que vivir
en paz comienza con uno mismo, haciéndolo en armonía con nuestro entorno, con
los demás y con todos los seres vivos a nuestro alrededor. Vivir en paz es un
proceso tanto externo como interno. De manera exterior, es una forma de vida en
la cual nos respetamos y amamos los unos a los otros, pensamos y conciliamos
nuestras diferencias culturales, religiosas y políticas. De manera interior,
todos tenemos que buscar dentro de nuestros corazones y mentes, y entender el
miedo que impulsa la violencia, porque si ignoramos la rabia interna, la
tormenta de afuera nunca cesará. La Asamblea General de las Naciones
Unidas declara en 2017 el 16 de mayo
como Día Internacional de la Convivencia en Paz. De hecho la Convivencia en Paz
es un proceso necesario para el desarrollo sostenible, donde se promueva el
diálogo y se solucionen a los conflictos en un espíritu de entendimiento y
cooperación mutuos. No puede haber desarrollo sostenible sin paz, ni paz sin
desarrollo sostenible.
Teniendo
presente los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y
especialmente el empeño en preservar a las generaciones venideras del flagelo
de la guerra, la Asamblea General invita a todos los Estados Miembros a que
sigan promoviendo la reconciliación, para contribuir a hacer realidad la paz
duradera y el desarrollo sostenible trabajando con las comunidades, los
dirigentes religiosos y otros agentes competentes, alentando el perdón y la
compasión entre las personas.
La
violencia está presente en los diferentes escenarios. Lo preocupante es que en
los hogares se ha incrementando, subiendo las cifras de maltrato a niños, la
pareja y hasta a los adultos mayores. Es tarea de todos que desde el corazón de
cada hombre, al interior del hogar, de
la oficina, del colegio y de los diferentes espacios donde se permanece, se dé
un cambio de actitud.
paso
a paso...
Pasos
para lograr la paz
1
Voluntad. Es fundamental no dejar que
los niños consigan las cosas fácilmente, enseñarles que para obtener buenos
resultados se requiere esfuerzo.
2
Exigencia. Permitirle realizar las cosas por sí mismo, superar dificultades y
estudiar alternativas. Ser firme en las exigencias y que estén de acuerdo a sus
posibilidades.
3
Valentía. Que tengan modelos que los incentiven a la formación de sus valores y
que les aporten algo positivo.
4
Respeto. Desde respetar su cuerpo, a sus padres, a familiares, maestros y a
todos los que están a su alrededor, hasta el cuidado de sus cosas.
5
Generosidad. Que tengan un buen referente, en este caso sus padres, dando una
limosna, orientando correctamente a alguien u ofreciendo un consejo a un amigo.
6
Cortesía. El dominar sus actos y tener respeto por los demás le permitirá hacer
uso de la educación y la amabilidad.
7
Orden. Para que haya armonía en el hogar es esencial este elemento. Cuando hay
orden en casa, hay normas y límites, lo que proporciona seguridad a los hijos y
enseña a tener disciplina.
8
Caridad. Buscar el bien personal y el de los demás, son ingredientes para
lograr la paz, además si se practica con mucho amor.
La
paz se vive:
•
Con un verdadero sentido de justicia.
•
Al reconocer los derechos propios y los de los demás.
•
Al saber diferenciar el bien y el mal
•
Trabajando honradamente
•
Siendo justo
•
Practicando la caridad
