Fiesta de la Luz... apaga y vámonos
Publicado en febrero 2009
Como cada año el 2 de febrero tuvo lugar
en las parroquias de Torrevieja la celebración de la Candelaria. En éste día se
recuerda la presentación del Niño Jesús en el templo, cuando la Virgen María,
observando estrictamente las leyes religiosas judías, fue al templo en
Jerusalén para ser purificada, cuarenta días después del nacimiento de su hijo.
Al llegar ésta festividad, todas las
mujeres que han tenido un hijo en el año que va desde el día de la fiesta al
año siguiente, se presentan en el templo para que su hijo sea bendecido. Pero
la Candelaria que es recordada, es la relacionada con la festividad de la Luz,
cayendo en ese lenguaje casi cursi de lo católicamente correcto.
Sin embargo ¿Cómo algo tan serio se
celebra con una cursilería como la Fiesta de la Luz?.
Es como para electrizarse cuando una
fiesta con tanta tradición se le pone el mote de Fiesta de la Luz... ¡pero no
eléctrica! a no ser que Iberdrola decida patrocinar La Candelaria, algo que
podría hacer con la subida que ha experimentado el recibo de la luz.
Miles y miles de clientes hemos sufrido
en nuestras carnes y en nuestros bolsillos la subida de las tarifas de la luz.
Y con esta nueva “alegría” nos enfrentamos en este 2009 con algo más que la ya
conocida crisis. Estamos asistiendo a la subida del recibo de la luz que ha
sembrado el caos y la polémica entre todos los usuarios, siendo en algunos
casos escandalosamente notable esta subida. Mirando los datos facilitados por
los medios de comunicación, los economistas se refieren a la subida media que
el recibo experimentó en el 2008, siendo esta de 9,08%, después de que en enero
se aplicara un aumento del 3,3% y en julio, cuando se liberalizaron las tarifas
de alta tensión, se llegó al 5,6 de aumento. Y ahora nos vienen las compañías
eléctricas con aquello de cobrar el recibo de la luz mes a mes, en lugar de
cada 60 días como se ha hecho hasta ahora.
¿Qué será lo próximo?. Las asociaciones
de consumidores han puesto el grito en el cielo y estudian la posibilidad de
requerir a las compañías eléctricas el reintegro inmediato de las cantidades
indebidamente cobradas a los usuarios. Y puestos a mirar y gritar al cielo
nuestras quejas, ha quedado atrás la fiesta de la Candelaria (o como dicen
algunos, la Fiesta de la Luz).
En cuanto a la luz eléctrica, mejor
apagar las bombillas -aunque sean de bajo coste y regalada por el Gobierno- que
pronto llegará el próximo recibo. Tal y como camina el año... mejor apaga y vámonos,
después de todo la Fiesta de la Luz éste año podría haber sido la fiesta del
apagón. Aunque ¡cuidado! Que el apagón analógico está rondando nuestros
hogares. A estas alturas en este “febrerico el loco" solo sé que “Hoy no me puedo levantar”.
P.D. ¡Felicidades a los electricistas por el
día de su patrona La Candelaria!
