Junio mes con una cita crucial



Publicado en mayo 2009

Hoy voy a empezar como los malos oradores, pidiendo perdón.
Perdón por hablar de un tema tan espinoso como la Declaración de la Renta, algo que por otro lado, nos hace a todos… casi iguales.
Al llegar estas fechas, palabras como: Programa Padre, Agencia Tributaria o deducciones generales; se introducen en nuestro lenguaje habitual. Aunque la expresión que mejor parece sonar es “Desgravación”.
Todos sabemos que tenemos una cita obligada en junio, y no solo con las urnas para las Europeas. El 30 de junio Hacienda nos espera. Es el último día de presentación. Por ello, quien necesite asesoramiento, puede, el próximo 1 y 2 de junio y, 23 y 24 de junio, ir al RENTA BUS de la Generalitat Valenciana, que visitará Torrevieja.
Un año más, deberemos cuidar cada paso. Lo requiere el asunto y lo requiere el tema. Recordemos que Hacienda está alerta y no se le escapa nada. Tanto es así que velando por el interés de todos, pone cerco, entre otros temas, ha los profesionales que hacen del fraude una extensión más de su profesión. Tal vez ésta sea una señal inequívoca de que las arcas públicas necesitan dinero de la forma que sea. Pero no se debería caer en la apatía, y cuando la situación remonte, sería bueno seguir mirando con lupa, por el bien de todos. Tal es así que de este año fiscal no pasa que procure tomar mis propias medidas. Creo que podría convertirme en ONG. Ni autónomo, como los que tienen en sus empresas el letrero de “se vende”. Ni sociedad anónima, como los famosos. Ni sociedad limitada, como las promotoras que han pasado a mejor vida. Nada de eso me convence. Y como el régimen fiscal más favorable es el de las ONG, hay que hacerse ONG a cualquier precio.
Menos mal que comienza la celebración de la Virgen del Rocío. Sería bueno pedir a la Blanca Paloma, nos guíe por éste pedregoso sendero. Si ella no lo remedia, acabaremos recorriendo las calles, buscando a la vida una salida de emergencia. Y como de lo que se trata es de saber cuanto valemos ¡que más da si somos humanos o seres vivos! ahora toca ser una persona “física” o sea, de las que presentan el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (I.R.P.F). Aunque el A.D.N. certifique que soy humano, que estoy vivo, y que poseo un cuerpo físico, me veo más cerca del conocido R.I.P (Descanse en paz). Por ello mejor coger una hucha y pedir por: “Padres Unidos Sin Curro” (PP.U.S.C). Después de todo ¡que no haría un padre por el pan de sus hijos!. Todo antes que tener un calendario donde los días estén en blanco, y la historia sean como la película: “los lunes al sol”. Lo deseable es tener un honesto vivir, y el prestigio social que supone ser un contribuyente en activo. Así podría afirmar: Hacienda somos… casi todos.

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